Mejorar la concentración al estudiar en casa ha sido, quizá, una de los mayores desafíos de los jóvenes, ya que con la procrastinación o encontrarse en la zona de confort produce que el estudiante no mantenga el ritmo y se ve por atrasarse en la clases virtuales o con los trabajos.
No obstante, este problema va más allá de solo encontrarse en un entorno diferente al del salón de clase, dado que las condiciones físicas, psicológicas y la disciplina de los jóvenes y adultos que cursan esta modalidad tiene que estar en completa sinergia.
Técnicas para mejorar las concentración al estudiar desde casa
Existen muchas técnicas o herramientas para aumentar la concentración, sin embargo, estas dependen del propio sujeto, visto que tener una rutina sana, alejarse de las redes sociales y organización se construyen a partir de los hábitos.
Controla tu tiempo
Organizar las actividades y asignarle un horario dentro de un cronograma de tareas suele ser la forma más factible de controlar el tiempo dedicado al estudio.
Tener claro cuánto te debes demorar y a qué hora vas a ejecutar la actividad te dará la sensación de responsabilidad, por lo que si tienes un tiempo establecido, vas a trabajar acorde a este y tu concentración estará puesta en terminar dentro de lo planificado.
Si no sabes cómo elaborar un cronograma o una agenda, te invitamos a leer el siguiente artículo:
• Tips para tener un cronograma de estudio efectivo en casa
Establece objetivos
No basta solo con dedicar un horario específico a ciertas tareas o clases, debes tener en cuenta que todo lo que hagas tiene una finalidad o una meta.
Plantearte objetivos permite que puedas dedicarte de lleno en el estudio y puedas cumplir a ti mismo, esto producirá que cuando estés estudiante lo hagas por convicción y no por obligación, lo cual puede hacerte perder el interés rápido.
No olvides que el ser humano actúa mejor cuanto tiene una meta y la satisfacción es mayor cuando logra alcanzarla. ¡Prueba premiándote!
Estudiar en un espacio adecuado
El espacio en el que estudias tiene un papel fundamental en tu concentración, no es lo mismo estudiar desde tu cama que sentado en un escritorio.
Procura ubicarte en un lugar lejos de distracciones o ruidos fuertes y que se encuentre totalmente limpio. Asimismo, siéntate en una silla cómoda y mantén una posición ergonómica en la que no te canses ni generes molestia en tu espalda.
El lugar debe estar bien iluminado, ya sea con luz natural o artificial, también debe contar con una buena ventilación y una excelente organización; usa solo lo necesario.
Aleja los elementos distractores
Cuando se estudia en casa o incluso de manera presencial, el estudiante se ve tentado por lo que llamaremos el ‘espíritu del ocio’, el cual se manifiesta a través de la necesidad de apartar la vista del objetivo para provocarle sensaciones placenteras.
Apaga tu celular o desactiva el Wi Fi, aléjate de videojuegos y cierra las pestañas que no estés usando en tu navegador para que no caigas inconscientemente en el mal hábito de posponer tareas, debido a que muchas veces aprender o desarrollar actividades académicas no genera las mismas emociones que manejar tu móvil.
• De su interés ¿Cómo evitar la procrastinación en el estudio en casa?
Duerme bien
Una de las razones que produce que la persona se desconcentre es la ausencia de sueño, lo cual se ve reflejado en la capacidad motriz del organismo y la articulación del pensamiento.
Mantenerse en estado de reposo es una de las acciones vitales del organismo, puesto que es necesario para que el cuerpo y la mente recuperen energías y puedan estar al máximo.
Según expertos, las personas entre 18 y 64 años deben dormir entre 7 y 9 horas o tomar siestas cortas cuando sienten somnolencia, esto permitirá que la mente pueda procesar mejor la información y el organismo estés más activo a la hora de estudiar o realizar cualquier actividad.
Limpia tu mente
Así como el espacio en que vas a ver clase a desarrollar tus trabajos de la universidad debe estar limpio, tu mente también debe estarlo. La concentración se ve afectada igualmente por el exceso de pensamientos.
Pensar en cosas negativas o querer hacerlo todo al mismo tiempo te va a generar una sobrecarga mental, por lo cual, no vas a tener el mismo rendimiento.
Practica meditaciones, ten un buen manejo de la respiración o aplica la técnica de Mindfulness, que te permitirá “prestar atención de manera consciente a la experiencia del momento presente con interés, curiosidad y aceptación”, según expresa la sociedad de Mindfulness y Salud.
Aprender a manejar las emociones del momento y aceptarlas puede ayudarte a controlar el estrés, la inseguridad y los malos pensamientos para que puedas dedicarte de lleno al estudio.
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