Ikigai: ¿Qué es y por qué aplicarlo?

En muchas ocasiones los jóvenes, universitarios y adultos en general se han enfrentado al dilema existencial de qué es lo que deben hacer con su vida, por ello, el ikigai es uno de los métodos para encontrar dicho sentido.

Este término se ha convertido en uno de los más populares durante los últimos años debido a las dificultades sociales, las transformaciones globales y la emergencia por el covid-19.

No obstante, muchas personas no están familiarizadas con este concepto o lo han escuchado, pero no lo han logrado asimilar.

Así pues, ikigai es un estilo de vida que profundiza en diferentes ámbitos de la vida humana, tanto internos como externos, para generar una reflexión y transformar la perspectiva personal.

Una vez entendido lo anterior, esta práctica oriental, bien aplicada, influye en cómo elegir una carrera, en qué profesión desempeñarse y cómo vivir, entre otros pensamientos que encuentras en este artículo.

¿Qué es el ikigai?

Esta palabra es originaria de Japón y, pese a que es aplicada por los nipones, no tiene una traducción concreta.

Sin embargo, expertos coinciden en que lo más cercano es “la razón de vivir” o “propósito”, visto que está conformado por las palabras ‘iki’, propio o relacionado con la vida y ‘kai’, que suena como ‘gai’, que suele tomarse como realización.

Al mismo tiempo, ese concepto no es simplemente una palabra, sino que se ha convertido en una idea espiritual equivalente a los chakras.

De acuerdo con la cultura japonesa, todas las personas poseen uno o varios ikigais que le permiten mantener un equilibro en su vida, tener un desempeño óptimo y alcanzar la felicidad.

Según afirman los españoles Héctor García y Francesc Miralles, autores del ikigai: los secretos de Japón para una vida larga y feliz, quienes popularizaron el término en 2016, las personas que aplican estas ideas viven plenamente.

¿Cómo aplicarlo?

Existe una filosofía profunda en torno a este estilo de vida, puesto que aborda pilares o ejes transversales.

Entre estos se encuentra la pasión, lo que amas; la profesión, por qué te pagarían; vocación, qué puedes aportar al mundo; y la misión, en qué eres bueno.

Por tanto, para desarrollar el ikigai, es vital que las personas puedan identificar los ítems internamente, es decir, haciendo una introspección.

En otras palabras, si deseas encontrar la realización, debes conocer quién eres, cuál es tu posición frente a la vida, si estás conforme con lo que haces o si ejecutas tus labores por convicción y no por obligación.

Asimismo, plantéate si has cumplido con las metas que te has propuesto o simplemente dejas todo a medio recorrido.

Por último, debes mantener límites en tu vida y llevar un equilibrio entre el trabajo, la parte académica, tus relaciones personales, el entretenimiento y la salud.

Cabe recordar que encontrar el ikigai no es una tarea fácil y mucho menos desarrollarlo, al contrario, es un proceso extenuante, pero que puede ayudarte a evolucionar, florecer, como lo denominan los japoneses; y tomar las riendas de tu vida.

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