Para el retorno gradual progresivo de las instituciones educativas, públicas y privadas al modelo de alternancia, se deben tener en cuenta los siguientes consejos y retos:
● Antes de volver al aula se debe contar con la responsabilidad y honestidad de padres, alumnos, profesores y todo el personal que labore en las instituciones educativas, siendo conscientes de cómo ha sido su accionar durante los ocho días previos del regreso a las aulas.
● Diligenciar oportunamente y con información veraz los formularios de seguimiento a las condiciones de salud, es otra de las estrategias que funcionan para minimizar el riesgo de contagio. Hoy en día los recursos tecnológicos nos permiten acceder a la información de manera inmediata y ello agiliza la toma de decisiones oportunas para evitar la propagación del virus.
● Evaluar la preparación de los colegios para la reapertura debe ser primordial. Aquí es trascendental evaluar la disponibilidad de docentes, personal de limpieza, suministros e instalaciones de agua, saneamiento e higiene, y escuchar a la comunidad valorando sus opiniones y preocupaciones sobre el regreso a clases.
● Una vez se establece el regreso a clases, debe seguirse el paso a paso del protocolo de bioseguridad, pues esto garantiza que las medidas sean efectivas: La desinfección completa al ingreso al lugar, teniendo en cuenta que todos usamos diferentes medios de transporte; el uso permanente del tapabocas, el distanciamiento físico, el lavado de manos frecuente con agua y jabón, además del porte y uso del kit personal de bioseguridad.
● La rigurosidad y disciplina en el autocuidado juega un papel vital en esta fase. Cada uno debe tomar la iniciativa para desinfectar los equipos, muebles o implementos que necesite usar o que previamente haya usado otra persona. Incluso a la hora de consumir algún alimento, el contar con una manipulación y desinfección adecuada de los mismos desde casa, es indispensable; el no hablar y mantener la distancia física es vital a la hora de comer.
Algunos de estos consejos nos pueden ayudar para el regreso a las aulas con un ambiente más seguro. Pero ¿Cuáles son los grandes retos que enfrentan las instituciones y los alumnos con este modelo?
“En medio de un proceso de educación en modalidad alternancia, uno de los retos que se presenta, es encontrar el equilibrio en los procesos de clases simultáneas, donde no solamente se debe tener en cuenta que el proceso de adaptación no se da en las mismas condiciones para todos, sino también, que hay quienes requieren mayor apoyo y recursos para su conectividad o seguimiento en el uso de las herramientas digitales. Además, cabe resaltar que como docentes estamos llamados a innovar en los procesos de enseñanza, lo que hace válido escuchar a nuestros estudiantes, convertirlos en agentes de transformación y construir para ellos modelos pedagógicos que se adapten a esta nueva realidad y que nos ayude a educar personas para el siglo XXI, con grandes habilidades y capaces de tomar decisiones trascendentales para las futuras generaciones” resalta John Mauro Piñeros, Director Ejecutivo del Colegio Wesleyano del Norte.
La escuela, lejos de ser un lugar de entrenamiento es un espacio donde los niños y jóvenes comparten actividades y experiencias de vida que son ventanas de oportunidad para desarrollar competencias cognitivas, afectivas, psicosociales y artísticas, que los llevarán a crecer en su autoconcepto, autoestima, pensamiento creativo y crítico entendiendo que su participación activa en su entorno genera transformaciones que marcan el futuro del mundo, es por esto que uno de los grandes retos es darles esa seguridad a los alumnos y padres para que vuelvan a las clases presenciales con modelo de alternancia, es algo vital para el desarrollo personal de la población infantil y juvenil.
La Secretaría de Educación y la Secretaría de Salud, han hecho un acompañamiento continuo para que todas las instituciones educativas cumplan con las normas de bioseguridad y resuelvan todas las inquietudes, actualizándose con la información adecuada. “Hoy podemos decir que el diseño del modelo de protocolos de bioseguridad es efectivo y nos ha permitido continuar con nuestros procesos aún en medio de la pandemia” resalta Piñeros.
