[vc_row][vc_column][vc_column_text][stm_post_bottom][stm_post_details][vc_column_text css_animation=”none”]Si bien muchas veces se critica a los padres por querer imponer una carrera universitaria a sus hijos, ellos sí pueden ser fundamentales en la decisión no desde su deseo de qué quiere que sean sino desde la orientación que le pueden aportar.
Sin que ellos pierdan la libertad de elegir, el padre de familia si puede ser quien les aporte un completo panorama de experiencias que les ayude a determinar su mayor afinidad ante las opciones.
Por esta razón acompáñelo a lugares que le puedan abrir perspectivas diferentes frente a sus afinidades, conversen sobre las experiencias y ayúdelo a descubrir sus gustos, pasiones y necesidades.
Además escúchelo y si considera que algo que está pensando no se ajusta a su forma de ser o no compagina con su personalidad, haga que caiga en cuenta antes de dar el paso definitivo.
Analicen juntos las diferentes universidades que tienen las carreras que ellos quieren estudiar, miren los pro y contras y así también enfrentarán juntos a futuro los sistemas educativos y los retos que cada institución les depare.
Si la decisión de ellos, no está dentro de lo que como padres tenían proyectado, respétela, dele su punto de vista y abra su mente para entender sus razones porque de pronto tienen más lógica de la que imagina.
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Finalmente tenga la conciencia de que ellos son quienes tendrán la última palabra, que además tienen derecho a equivocarse y a aprender de sus errores y que quienes enfrentarán este reto, dentro del aula y posteriormente fuera de ella, serán ellos y por lo tanto son los que deben trazar su propio camino.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
